Introducción
El período inmediatamente anterior a la Restauración Meiji en Japón, también conocido como el «período Edo tardío» o «período Bakumatsu», fue un momento de grandes cambios políticos, sociales y culturales en Japón. Durante este período, se produjo una transición desde el sistema feudal del shogunato hacia un sistema de gobierno moderno. A su vez, estos cambios históricos tuvieron un gran impacto en las artes marciales japonesas y en la forma en que se practican hoy en día.
El final del shogunato y el inicio de la Restauración Meiji
El shogunato Tokugawa, que había gobernado Japón durante más de 250 años, comenzó a enfrentar problemas políticos y económicos en el período Edo tardío. Además, la influencia occidental en Japón estaba en aumento y el shogunato se vio obligado a abrir las fronteras del país a los extranjeros. Estos cambios y tensiones llevaron a una serie de conflictos armados y al final del shogunato en 1868, con el inicio de la Restauración Meiji.
La Restauración Meiji fue un período de grandes cambios en Japón, en el que se estableció un sistema de gobierno moderno y se implementaron reformas para modernizar el país. Estas reformas incluyeron la abolición del sistema feudal, la introducción de la educación occidental, la creación de un ejército moderno y la construcción de infraestructura.
Impacto en las artes marciales
La Restauración Meiji tuvo un gran impacto en las artes marciales japonesas. Con la abolición del sistema feudal, las artes marciales tradicionales, conocidas como koryu, comenzaron a perder su importancia en la sociedad. Muchas de estas artes marciales tradicionales se basaban en la lealtad a un clan o señor feudal y ya no eran necesarias en un sistema de gobierno moderno.
Sin embargo, algunas de estas artes marciales tradicionales sobrevivieron y se adaptaron a los cambios. A menudo, esto implicó la eliminación de técnicas y principios que se basaban en la lealtad feudal y el énfasis en el desarrollo personal y el entrenamiento físico. Estas artes marciales adaptadas se conocen como gendai budo, o «artes marciales modernas».
Entre las artes marciales modernas que surgieron en este período se encuentran el Kendo, el Judo y el Karate. El Kendo, o el «camino de la espada», se basa en las técnicas y principios del Kenjutsu tradicional, pero se ha adaptado para ser practicado con un sistema de protección y reglas para competir. El Judo, creado por Jigoro Kano, se basa en el Jujutsu tradicional pero se enfoca en el desarrollo personal y el entrenamiento físico, y tiene un sistema de competición. El Karate, desarrollado en Okinawa, también se basa en las técnicas y principios del “Te” tradicional, pero se ha adaptado para ser practicado como un deporte y una forma de auto-defensa.
¿Ninjutsu/Bujinkan = Ko Ryu/Gendai Budo?
Hay otro aspecto igualmente importante de este último período (la Restauración Meiji) relativo a las artes marciales que no suele mencionarse. en esta época, Japón estaba fuertemente supervisada por las potencias internacionales, que presionaban para que se rompieran las políticas aislacionistas, y se fomentase el comercio y el intercambio cultural. Parte de este proceso permeó hacia el mundo marcial y el resultado que vemos en las artes marciales mencionadas anteriormente, pero también en el Aikido, es el de la transición de “Ko-Ryu” al “Gendai-Budo”. En el caso del Ninjutsu, como es obvio, la resistencia a la apertura fue mayor retrasándose al menos una generación en abrirse a los no japoneses. En este aspecto tuvo un papel capital la transición de Toshitsugu Takamatsu a Masaaki Hatsumi. El apodado “Tigre de Mongolia”, a quien dedicaremos al menos una entrada, fue el que autorizó a su heredero, el “Venerable Dragón Blanco”, a empezar a enseñar a occidentales. De esta forma, el papel “modernizador” que pudiera imputarse a Jigoro Kano o Morihei Ueshiba, por ejemplo, lo tiene plenamente nuestro Soke, Hatsumi Sensei.
La manera en que se aperturó el Ninjutsu en forma de la organización Bujinkan Dojo Internacional tiene implicaciones directas para las diferencias que podemos observar en cuanto a organización, difusión y desarrollo de este arte, comparado con aquellas que fueron adaptadas a la modernidad previamente. Este aspecto es capital para entender dónde estamos hoy, básicamente en una interesante encrucijada.
Conclusión
El período inmediatamente anterior a la Restauración Meiji y los inicios de la misma tuvieron un gran impacto en las artes marciales japonesas. Con la abolición del sistema feudal y la implementación de reformas para modernizar el país, las artes marciales tradicionales perdieron su importancia en la sociedad y fueron adaptándose a la nueva vida, dando lugar a las artes marciales modernas que conocemos hoy en día como el Kendo, el Judo el Aikido y el Karate, o desapareciendo. El Ninjutsu quedó “oculto” a los ojos de las potencias occidentales hasta bien entrado el s.XX, de manos de Takamatsu sensei y sobre todo, Hatsumi sensei. Estos fenómenos tienen influencia directa en la realidad de nuestra organización, Bujinkan Dojo International.
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